Un consejo técnico se encargará de evaluar las decisiones que tome esa entidad en torno a los proyectos más espinosos de Colombia en materia ambiental.
Luego de las polémicas en las que estuvo inmersa la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (Anla), su nuevo director, Rodrigo Suárez, y el entrante Ministro de Ambiente, Luis Gilberto Murillo, quieren empezar a ser unos cambios al interior de la entidad.
El primero de ellos fue presentado este viernes en horas de la tarde. Un día después de que fuera designado Suárez, anunciaron la creación de un nuevo órgano: el Consejo Técnico Consultivo para el Licenciamiento Ambiental.
Este grupo se encargará de analizar previamente algunas de las decisiones que le competen a la Anla. Específicamente, evaluará la viabilidad de proyectos críticos que requieran una licencia ambiental o que ya estén en ejecución y necesiten modificaciones. Entre ellos se encuentran los siguientes:
1. Los que usan tecnologías no aplicadas del país.
2. En los exista desacuerdo entre la ANLA y las autoridades ambientales regionales o con Parques Nacionales Naturales de Colombia.
3.En los que las comunidades hayan hecho ejercicios de participación en contra del mismo.
4. En los que el proceso de consulta previa finalice sin acuerdo.
5. Los que den por terminado el proceso consultivo porque las comunidades no justificaron su incapacidad de asistir.
6. Aquellos cuya autorización implique un ajuste en la designación ante la Convención RAMSAR.
7. Aquellos cuya autorización pueda comprometer designaciones internacionales dentro de la Convención de Patrimonio de la UNESCO.
8. En los que puedan tener impactos transfronterizos.
9. Aquellos que impacten el recurso hídrico de manera intensiva en cuencas vulnerables al desabastecimiento (categoría del IDEAM).
10. Aquellos que impliquen reasentamientos masivos.
La idea es que el nuevo Consejo analice el “borrador” de las decisiones que tome la Anla luego de haber finalizado del procedimiento de licenciamiento, y en no más de treinta días emita un concepto.
